He cerrado los ojos y te vi sonriendo,
cojo el teléfono para llamarte...
Con lo mal que se dan las segundas partes
darnos una tercera oportunidad da miedo.
Tres vidas encerradas en una sola,
el antes, durante y después de ti.
No sé si tengo fuerzas para buscar el cinexin
con el que adelanto y retraso aquella época.
Y se me cayó una gota de dulce de leche
en la Nespresso de Reyes,
como si el pasado y el presente
huyeran del futuro como de un demente.
Te busco en la Latina, en Iglesia, en Daily, en Paddock, en Green y en el Retiro,
pero cada día estás más lejos y olvidaste el camino a mi barrio.
Acabé cerrando los ojos otra vez
para conseguir verte antes de soñarte.
Al fin y al cabo es como mejor podemos ver a quien echamos de menos..
ResponderEliminarPrecioso!
"Tres vidas encerradas en una sola, durante y después de ti"... nunca hay olvido para aquello que tanto se ha querido, o lo que nunca se ha dejado de querer.
ResponderEliminarBesos de jueves.