Vacío cuando pasan estas cosas y no estás
cuando nos vamos a comer y hay una silla libre,
cuando me levanto pensando en tí, me giro,
y la soledad me devuelve la mirada sonriendo
llena de nostalgia de lo que nunca jamás sucedió.
Pero hay que vivir entre muertes y ausencias,
entre idas y venidas,
entre relocos y recuerdos.
Una flor amarilla como despedida
en un manto de rojos y blancos,
como lo que fuí en tu vida,
no me esperes, seguramente ya he llegado.
Con todas estas (mis) letras
rellena el crucigrama
porque la última vez me dejaste sin palabras,
porque sin tu voz, ni la de Quique me llena.
preciosa entrada
ResponderEliminarholaa
ResponderEliminarcomo pesan las ausencias :(
un beso enorme.
http://www.youtube.com/watch?v=9KhtndQWQZ0
ResponderEliminarA mi me recuerda, que volver la vista atrás es bueno a veces, pero muchas veces no, porque si no más dura se nos hace la caida (previa)...
Te (re-)leo :)